Vianella Díaz había iniciado hace algunos meses la búsqueda de su papá biológico. Ella vive en Córdoba y tenía el dato de que su padre había tenido un comercio en la zona de 32 y 2.
“Nací en La Plata en 1986. Toda la vida viví sola con mi mamá. Cero drama, ningún trauma. No se me ocurrió preguntar sobre mi padre. Yo no lo conozco, no tengo ni una foto de él”, había indicado Vianella a LAPLATA1.com en diciembre del año pasado.
En ese sentido, había explicado que ella en realidad vivió un año en La Plata, pero ya para su segundo cumpleaños estaban en Córdoba, donde su mamá tenía la mayoría de los afectos. En La Plata, su madre había trabajado como modista y tenía un taller de costura.
Lo cierto es que su madre falleció hace 9 años y desde hace algunos meses empezó a tener curiosidad por lo que había sido de la vida de su padre biológico. Su mamá no le había dado mucha información.
“Mi mamá me dijo que habían tenido una relación casual, que no fue un noviazgo formal, y que él sabía que estaba embarazada”, había manifestado.
Finalmente, gracias a la viralización de la historia, Vianella pudo dar con familiares directos de su papá biológico.
“Me contactaron familiares de él directos. Fueron muy piolas, amables y educados. Cruzando datos aleatorios que tenía, cositas anotadas, me di cuenta que estaba en el rumbo correcto”, señaló.
“Hablamos mucho, me contó de la familia de él, de cómo estaba conformada. Re bien. Estuvo bueno”, agregó.
Vianella está contenta por más de que la búsqueda haya tenido un final algo inconcluso. Y es que esta familiar habló con el hombre pero el sujeto negó que tuviera una hija perdida. Vianella, sin embargo, sabe que es él.
“Pude verificar a través de datos, lo que mi madre me decía de él. Se ve que con los años no cambió mucho. Es tal cual ella lo había descripto. Eso hizo que valore mucho más las decisiones que tomó mi mamá en ese momento. No estoy triste. Al contrario, por lo menos tengo una cara que poner en mi mente. Comprobé lo que me decía mi mamá”, completó Vianella.
