Es una de las mejores apariciones de las divisiones formativas del Pincha en el último tiempo y desde que hizo su estreno en primera división de la mano de Eduardo Domínguez se asentó en el plantel profesional y se convirtió en un titular indiscutido. Sin embargo detrás de este gran presente y enorme futuro hay una historia de sacrificio y varias frustraciones deportivas que el propio futbolista contó en Radio La Red.
En diálogo con AM 910 Tobio Burgos explicó que antes de arribar al Pincha se probó por tres equipos y agregó: "Quedé fichado para metro en River, me llamaron el miércoles para concentrar y me tenía que quedar hasta el domingo, pero tuve la mala suerte de que volví descompuesto de un viaje con Chascomús, entrené con vómitos y me dijeron que me vuelva y no me llamaron más".
Lejos de lamentarse por la chance desperdiciada de no quedar en el Millonario el extremo de 20 años sentenció: "Se tenía que dar así". Luego siguió en busca de su sueño de ser jugador profesional y recaló en Argentinos Juniors donde vivió una insólita situación y recibió una inesperada respuesta: "Fui a probarme, en la práctica hice cuatro goles, pensé que iba a quedar ahí y me dijeron que no por el físico. Me bajonee mucho y ahí mis representantes me dijeron que había parecido Estudiantes y por suerte se dio".
Tobio Burgos admitió que luego de tantas negativas (también lo desecharon en Defensa y Justicia) y de luchar por su objetivo llegar a primera ""es soñado, lo que quise siempre de chico y lo disfruto mucho" y contó que con el primer dinero que recibió ayudó a su familia y tuvo un tierno gesto con su mamá y contó: " A mi vieja le compre una moto para que vaya laburar".
En el final de la entrevista dejó una enseñanza para todos aquellos juveniles que desean ser profesionales y sentenció: "No hay que bajar los brazos. Yo ya era grande, tenía 17 años y se hacía difícil poder quedar en un club" y ese sueño luego de la negativa de River, Argentinos Juniors y Defensa se cumplió en el predio de City Bell.
