El inicio de los trabajos físicos y futbolísticos del plantel de Eduardo Domínguez arrojó una muy buena noticia teniendo en cuenta que el volante trasandino realizó gran parte de las tareas físicas y movimientos con pelota a la par de sus compañeros luego de cuatro meses de inactividad.
Recordemos que el ex Huachipato el pasado 17 de marzo se descompensó en pleno partido frente a Boca en UNO y debió ser internado de urgencia tras sufrir convulsiones. Luego de permanecer durante diez en observación y someterse a una batería de estudios médicos en nuestra ciudad y en Capital Federal se constató que había tenido una trombosis del seno longitudinal superior del cerebro sin ninguna causa que haya motivado ese cuadro.
Por la información a la que pudo acceder LAPLATA1.com en breve Javier Altamirano volverá a efectuarse una serie de chequeos exhaustivos y el próximo 22 de julio habrá un encuentro entre los especialistas que lo atendieron en el Instituto Fleni, el cuerpo médico de Estudiantes y doctores chilenos para analizar esos resultados y tomar una decisión pensado en un posible regreso a los campos de juegos.
Cabe destacar que Altamirano, por prescripción médica, aun se encuentra anticoagulado y por lo tanto debe evitar la actividad física con ejercicios bruscos (un partido de fútbol) ya que le pueden provocar traumatismos o heridas. En principio si los estudios vuelven a arrojar resultados positivos, sumado a que no se le encontró ninguna causa del motivo por el cual se le originó la trombosis, el siguiente paso será quitarle la medicación y plantearle al futbolista de la Selección de Chile que existe la chance concreta que puede intensificar su preparación pensando en un posible regreso que claramente aún no tiene ninguna fecha determinada.
Mientras tanto el futbolista albirrojo trabaja a diario en el complejo deportivo de City Bell con la sensación que lo más complejo del cuadro de salud ya lo superó y que la chance de retornar a un campo es posible.
