El próximo domingo a las 19:30 el Lobo recibirá a Estudiantes en 60 y 118 y luego de analizar la victoria frente a Newells a Eduardo Domínguez lo consultaron sobre el próximo partido que deberán afrontar en la Copa de la Liga y que mantiene expectante a gran parte de la ciudad de La Plata.
En ese sentido el orientador táctico Pincha hizo un particular análisis y se sinceró: "Será un partido importante pero no es de vida ni de muerte... ¿'Viste que ahora muchos dicen vamos a dejar la vida'? ... Yo la vida la dejo por mi familia no por un partido de fútbol". Y en esa misma postura de sacarle dramatismo al derby platense sentenció: "Todos vamos a despertar al otro día, algunos contentos y otros no tanto pero esto sigue y continúa y el mensaje de todos tiene que ser eso. Se vive en el país una locura extrema que pareciera que un partido de fútbol es fatal y hay que comunicar que tenemos que estar tranquilos y vivir en paz".
Domínguez admitió que frente a Gimnasia " es un partido importantísimo que lo espera toda la ciudad. Es una final para nosotros. No lo vamos a tomar a la ligera. Es el partido que el hincha quiere entrar a la cancha y nosotros vamos a representarlos a ellos y tenemos que hacerlo como tal".
Cabe destacar que el único clásico que afrontó como entrenador albirrojo lo perdió y le permitió al Lobo cortar una racha de trece años sin poder ganar pero en el contacto con los medios de comunicación el ex técnico de Independiente y Huracán dejó en claro que ahora es otro el contexto y explicó: "Yo llegué y a los diez días ya tuve ese partido y hoy ya llevo casi un año. Nos encuentra más fuertes y queremos demostrar lo fuerte que somos" y reconoció que "son partidos que entusiasman, que motivan. Y hoy me permiten trabajarlo de otra forma conociendo mejor al rival y el equipo me conoce más a mí y en otra situación a la que llegué".