Si hay un apellido emblemático en la historia de Estudiantes, sin dudas, es Verón. El peso que significa representar a esa dinastía o al menos portar el número que lo identificó a lo largo de su carrera, no es fácil de sobrellevar. Tras su retiro definitivo, fueron muchos jugadores los que "heredaron" ese dorsal y particularmente durante la última temporada, en la lista de buena fe de Copa Libertadores, fue un juvenil quien tuvo el privilegio de tener esos dígitos en sus espaldas.
Máximo Guzmán difícilmente sea recordado por el hincha albirrojo, dado que ni siquiera llegó a ser convocado a un partido de Primera división, pero él probablemente nunca olvidará el dorsal que tuvo el honor de llevar. Vale recordar que el delantero categoría 2002 había sido incorporado a la lista de buena fe para la etapa preliminar de la Copa Libertadores 2022, en el mes de febrero, y allí a la hora del reparto de números le tocó ese privilegio, al no estar en el plantel Deian Verón.
El "Gringo", como lo llaman a este lungo atacante oriundo de Pergamino, había arribado al "Pincha" en 2020 y en ese año casi que no pudo mostrarse por la pandemia. Recién en 2021 tuvo actividad y tras destacarse en unos pocos partidos en Cuarta, enseguida le llegó su oportunidad en Reserva. Sin embargo, durante este tiempo, nunca logró afianzarse como titular indiscutido en el Selectivo y por tanto terminó la última temporada jugando en las inferiores.
Guzmán, entonces, no entró dentro de la lista de jugadores convocados para firmar el primer contrato, y por ello, desde hace algunas semanas venía considerando distintas opciones. La posibilidad que más lo sedujo fue la de Brown de Adrogué y de ese modo será nuevo jugador del equipo de la Primera Nacional, en donde compartirá plantel con otro ex Estudiantes como Mauricio Rosales. En dicha institución también, hace poco tiempo, se destacó otro exjugador albirrojo, con características y una situación similar vivida (quedó libre), como Facundo Bruera.
