El juicio por jurados por el homicidio de Miguel Ángel Gómez (66) iniciará hoy, donde 12 personas serán las encargadas de evaluar si la pareja del abogado, Marina Paola Irala, (46) y quien sería su amante, Cristian Olguín, fueron los autores materiales del hecho.
De acuerdo con la investigación de la fiscal Virginia Bravo, quedó acreditado que pasadas las 22.40 del 15 de noviembre del 2015, al menos dos personas ingresaron a un domicilio de City Bell y atacaron a Gómez. Previamente, Olguín e Irala habrían coordinado el plan, ya que la mujer vivía en la residencia con su esposo.
A Gómez lo atacaron “salvajemente con golpes de puño a la par que, utilizando elementos cortantes, le provocaron heridas predominantemente en la cabeza, cuello y tronco, que lo condujeron a un estado de indefensión y, con un elemento candente, le infirieron quemaduras de diferente consideración”, señaló el Ministerio Público.
Después de golpear con saña a la víctima, los imputados le colocaron una cinta adhesiva a la altura de los ojos, y le pusieron una bolsa a la cual sujetaron con una corbata perteneciente al abogado, de acuerdo con el requerimiento de elevación a juicio del caso. Por último, los acusados envolvieron al profesional con un acolchado, lo subieron en estado agonizante a un Volkswagen Gol Trend y lo llevaron hasta un descampado de 143 y 511.
Golpes y asfixia
El cuerpo de Gómez fue hallado en el rodado en las primeras horas de la mañana del 16 de noviembre de 2015 en el lugar. El cadáver presentaba signos de haberse intentado infructuosamente prenderlo fuego. La muerte se habría producido por “traumatismo grave de cráneo y asfixia por aspiración de sangre”, indicó la fiscalía.
“Tanto las prendas que aseguraran las manos y la bolsa de nylon que le fuera colocada en la cabeza - corbatas - como el acolchado pertenecían a la víctima y se encontrarían previamente en el domicilio que compartieran Gómez e Irala”, según surge del expediente.
La pareja del abogado está acusada por “homicidio agravado por el vínculo y por su comisión con ensañamiento, alevosía y con el concurso premeditado de dos personas”. En tanto, quien fuera sindicado como su amante fue procesado por “homicidio agravado por su comisión con ensañamiento, alevosía y con el concurso premeditado de dos o más personas”.
El juicio estará a cargo de Claudio Bernard como juez del Derecho, mientras que la acusación estará en manos de la fiscal Helena de la Cruz Orsi. Por su parte, el particular damnificado estará representado por el abogado Julio Beley.