“Mi guerrera va a salir”, dice Eugenia. Su pequeña, Emilia, de solo 8 meses, acaba de llegar a La Plata desde Junín a través de un vuelo sanitario. Fueron momentos muy angustiantes para la familia por la incertidumbre que generaba este traslado.
En diálogo con LAPLATA1.com, Eugenia cuenta cuáles son las dificultades de su beba, que da pelea ahora en el Hospital de Niños.
“Ella tiene una patología renal que la descubrimos antes de sus 2 mes de vida. Tiene un reflujo vesicouretral de grado 5 y una vejiga patogénica. Lo manifestó con fiebre y haciendo una septicemia. En ese episodio, como en este último, con riesgo de vida. Se le están realizando estudios de todo tipo para ver si tiene una disrafia oculta y aún no se encontró nada”, cuenta.
Y agrega que “hace infecciones urinarias repetitivas y con bacterias resistentes. La mayor parte de su corta vida la transcurrió internada y este domingo pasado nuevamente se descompensó, así que realizó tratamiento para afrontar otra infección pero en el quinto día de tratamiento, después del suministro del antibiótico, comenzó a convulsionar durante horas sin que ningún tratamiento dé resultado. Por eso la entubaron y la durmieron”.
Por tal motivo fue que se pidió el traslado. Ellos son de Ameghino. Allí hay un hospital pero, desde ya, mucho más pequeño y menos complejo que el Hospital de Niños de La Plata.
“Requería de un electroencefalograma continuo para ver si las convulsiones continuaban y para buscar la medicación correcta. Ahora se está intentando lograr eso para poder despertarla y saber cómo está, porque fueron muchas horas las que estuvo convulsionando y eso pudo haber dejado secuelas”, señala Eugenia.
Los momentos previos a este vuelo no fueron sencillos. “Ayúdenme a orar para que todo salga bien; estamos esperando el avión sanitario para el traslado. Si Dios nos permitió llegar hasta acá es porque mi guerrera va a salir”, había escrito antes del vuelo.
Afortunadamente todo salió bien y así lo reflejó también Eugenia en sus redes sociales, donde recibió el respaldo y la fuerza de familiares, amigos y personas que se sensibilizaron con la lucha de la pequeña: “EMILIA llegó bien; en el vuelo no se complicó nada. Ya le realizaron los primeros estudios para comenzar a ajustar las medicaciones. Sigue sedada y con respirador. Gracias por acompañarnos en esto tan difícil que nos toca vivir. Gracias por sus oraciones y gracias a toda la gente que nos ha llamado a lo largo del día ofreciendo ayuda de todo tipo. Sigamos pidiendo por favor. Gracias y mil gracias”.
