El Ministerio de Salud de la Nación recomendó este jueves una actualización de los protocolos de prevención contra el coronavirus y estableció que ya no será obligatorio la toma de temperatura corporal ni el rociado de manos con alcohol, entre otras disposiciones.
Desde la cartera sanitaria precisaron que las instituciones y demás organismos "podrán establecer las medidas que entiendan pertinentes y necesarias para el desarrollo de cada actividad", así como la facultad de instrumentar "medidas sanitarias adicionales", dependiendo cada actividad.
El ministerio conducido por Carla Vizzotti determinó que no será necesario sostener el control de temperatura corporal, el rociado de manos con alcohol en los accesos a edificios, los turnos programados, las sanitizaciones y otras medidas adicionales, a menos que las mismas se consideren "fundamentales" según cada sector.
El Gobierno fundamentó esta modificación en el hecho de que el 58,9 por ciento de la población tiene el esquema de vacunación completo y el 91,5 por ciento de los mayores de 18 años tienen al menos una dosis.
Asimismo, se destacó la estabilidad de los casos, la cual está en un número bajo, y la disminución de las hospitalizaciones y las muertes "por más de 23 semanas consecutivas"