Vecinos de la zona de 520 y 25 se resisten al cierre de la calle 27 por parte del Club San Luis.
El conflicto escaló el sábado cuando la institución comenzó a colocar palos y maderas para realizar el cierre. Sin embargo, los vecinos quemaron gomas en señal de protesta y tuvieron que dar marcha atrás.
“Abrieron la 522, de 25 a 27, pero ahí te chocás con Nini. No tenemos como cruzar para tener acceso a la 520. Nos afecta mucho que no pueda entrar una ambulancia o un patrullero”, contó Mónica, una de las vecinas, a LAPLATA1.com. Este martes tendrán una reunión con las autoridades del Club San Luis, pero no tienen mucha confianza: creen que tarde o temprano se producirá ese cierre.
El Club de Rugby tiene el permiso a partir de una ordenanza que fue aprobada por unanimidad en el Concejo Deliberante en agosto del 2019. Allí se especifica que el San Luis podrá apropiarse de esa calle por cinco años. “El espacio cedido en uso será destinado exclusivamente a la realización de actividades deportivas y recreativas”, dice el proyecto.
Además, el Club estaba obligado a cumplir con los siguientes requisitos: 1) No cambiar el destino autorizado durante la concesión; 2) Restituir el sector en óptimas condiciones de mantenimiento y transitabilidad a la finalización de la cesión de uso, o decretada su revocación, en el plazo que se fije al efecto; 3) No ejecutar cualquier tipo de construcción permanente y/o superficie cubierta de ninguna naturaleza en el mencionado espacio cedido en uso; 4) Realizar el pago de los gastos generados para la apertura de la calle 522 entre 25 y 27 de la ciudad de La Plata, conforme a las condiciones, modalidades y procedimientos que se establezcan por Convenio con la Secretaría de Obras, Servicios.
Pero el punto más importante es el artículo 6: “La cesión otorgada por la presente se efectivizará una vez que se encuentre realizada la apertura de la calle 522 entre 25 y 27 con el ancho suficiente para garantizar la doble circulación, como así también la instalación de un cruce semafórico que regule los movimientos del tránsito y garantice los giros seguros, la apertura del separador central en la Avenida 25, la construcción de veredas para la circulación peatonal y su acceso al transporte público sobre la Avenida 25 y la colocación de refugios peatonales para la espera del transporte público”.
Los vecinos aseguran que la calle 522 fue abierta, pero no con todas las condiciones fijadas en la ordenanza. Ese será el argumento de los vecinos para buscar que no avancen con el cierre de la calle 27.
