El 2020 comenzó con dos liderazgos políticos muy definidos en La Plata.
Uno de ellos es el de Victoria Tolosa Paz, que hizo su primera aparición 'fuerte' en la política local cuando encabezó la lista de concejales de Unidad Ciudadana en el 2017.
Su instalación la perfiló como una de las pre-candidatas a Intendente en el 2019, perdiendo por escasos votos contra Florencia Saintout.
Esta derrota, sin embargo, fue leída por su entorno como un nuevo paso hacia adelante. Había sido derrotada de manera pírrica por una contendiente con varias elecciones en el lomo y con mayor instalación pública.
De cara a las legislativas del 2021, Tolosa Paz emerge como una referente fortalecida de la oposición local. El rompecabezas nacional es un elemento clave: la dirigente platense es amiga de Alberto Fernández. Inclusive, trabajó con el actual presidente en el Grupo Callao, el semillero 'albertista' donde participaron Santiago Cafiero, Matías Kulfas y Cecilia Todesca entre otros destacados funcionarios.
Tolosa Paz es actualmente la presidenta del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales y una de las caras más visibles del plan de Alberto Fernández para combatir el hambre.
Desde el 10 de Diciembre multiplicó sus apariciones públicas en medios nacionales y cuenta con una importante caja nacional para posicionarse fuertemente. Pero el rompecabezas no solo involucra a Tolosa Paz: su pareja, Enrique 'Pepe' Albistur, es un viejo amigo de Alberto Fernández y otro hombre clave de la estructura del Frente de Todos.
UNA INÉDITA SITUACIÓN PARA GARRO
El otro dirigente platense que salió airoso de las elecciones del 2019 fue Julio Garro, que logró retener su reducto.
Pero así como Tolosa Paz cuenta con un viento de cola a nivel nacional, para el Jefe Comunal el escenario es bien diferente.
El consultor y publicista Guillermo Raffo ya estaría diagramando los próximos pasos a seguir para llegar bien parados al 2021. Garro tiene el desafío de encarar una campaña inédita en su carrera política: su espacio será el oficialismo a nivel local, pero la Provincia y Nación están conducidas por otro color.
Sin Vidal y Macri, ¿cuál será el perfil del intendente? En diciembre del año pasado, Garro indicó que apostaba a tener un diálogo fluido con Alberto Fernández y Axel Kicillof. Pero más allá de la buena voluntad de ambas partes, está claro que el contexto será más cuesta arriba que entre el 2015 y el 2019 cuando los tres niveles de gobierno se pintaban de amarillo.
Garro tendrá que extremar su muñeca para conseguir consensos y lograr acuerdos que lo dejen bien posicionado de cara al 2021. Y, fundamentalmente, con el menor desgaste posible.
El intendente viene de conseguir un importante 47% en el 2019 gracias al corte de boleta. Pero hay quienes entienden que ese guarismo pudo ser posible por el estilo y el perfil más 'duro' de la candidata opositora, que favorecía una polarización total.
Con una Tolosa Paz fortalecida por el escenario nacional, el 2021 amenaza con más complicaciones para el ejecutivo local, que puede quedar cercado por el aluvión albertista a nivel nacional y provincial.
Tampoco hay que subestimar la 'sed de revancha' que guarda Victoria Tolosa Paz, quien finalmente no pudo enfrentar a Garro en el 2019 y denunció operaciones políticas en su contra para sacarla del camino electoral.
