A mediados del año pasado, la Municipalidad de La Plata había anunciado un novedoso sistema para controlar al transporte ilegal.
Los remises, por ejemplo, iban a contar con una oblea de seguridad de color amarillo ubicada en el parabrisas del vehículo.
Dicha oblea contaría con un código QR que permitía a los inspectores constatar la habilitación, datos del propietario, patente y disco.
Sin embargo, la implementación quedó a mitad de camino: se calcula que solo un 30% de los autos llevan esta identificación. Es decir, sobre un total aproximado de 1.500 autos que componen la flota de remiserías habilitadas, cerca de 500 cuentan con este sistema QR.
Inclusive, muchos vehículos tienen la insignia ya despintada por el impacto del sol y las lluvias.
A las remiserías llegaron algunas denuncias de pasajeros, quienes pretendían contar estos datos de control.
Pero también es una demanda de las agencias habilitadas que luchan contra los remises ilegales.
