Las fuerzas de seguridad allanaron dos puestos en Malargüe y San Rafael en el marco de la investigación y detuvo al encargado de uno de los predios, mientras que no halló al segundo, sobre el que se libró una orden de captura.
En sendas inspecciones realizadas por la Unidad Investigativa de Malargüe, Policía Rural y Bomberos en puestos de Los Molles y El Sosneado encontraron una sustancia que, a simple vista, parecía ser veneno fosforado.
Los investigadores creen que este líquido pudo haber causado la muerte de los 34 cóndores y otros animales autóctonos en el sur provincial.
En los Molles se secuestró además un rifle calibre .22 con mira telescópica y se detuvo a una persona de apellido Baigorria, acusado de ser uno de los autores de los hechos investigados.
Sobre el segundo sospechoso, de apellido Rojas, se libró una orden de captura ya que no estaba en el lugar al ser allanado.
Mañana, en tanto, llegará a Malargüe una comisión de peritos de la División Delitos contra el Medio Ambiente de la Policía Federal, a fin de re inspeccionar el lugar de los hechos y tomar muestras para determinar si los puesteros contaminaron napas de agua o especies vegetales del lugar. Se contará para ello con la colaboración de uno de los helicópteros de la Policía de Mendoza.
"Existen líneas investigativas firmes para determinar en qué local de venta de agroquímicos los autores consiguieron la sustancia venenosa utilizada", informaron fuentes oficiales.
Los análisis de laboratorio para determinar qué sustancia ultimó a los animales y si ésta es o no compatible con la secuestrada en los puestos, demorará como mínimo entre quince a veinte días, detallaron los informantes.
