La Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional comunicó que, según sus cálculos, la inflación acumulada de 2017 en Venezuela fue de 2616 % y que la caída del PBI llegó a 15%.
El Parlamento venezolano, dominada por la oposición, es la única institución oficial que publica cifras del costo de vida, después de que el Banco Central dejara de ofrecer números sobre este y otros indicadores económicos en 2015.
La industria petrolera -que aporta el 96% de los ingresos al país- produce 1,9 millones de barriles diarios, según la última cifra oficial difundida, por lo que la merma de la producción de petróleo superó los 400.000 barriles el año pasado, según el Parlamento.
El gobierno, que no reconoce al Congreso, achaca la grave crisis al desplome de los precios del petróleo y a una "guerra económica" de empresarios de "derecha" que, asegura, busca derrocar al presidente Nicolás Maduro.
El diputado Rafael Guzmán, a cargo de la presentación, anunció también que "el índice de inflación para diciembre fue de 85%".
"No hay aumento de salario que pueda combatir esta situación", dijo durante la presentación, al referirse a los anuncios del gobierno de Nicolás Maduro sobre suba de los sueldos de los docentes y empleados públicos.
"Somos el único país en hiperinflación del mundo", afirmó el diputado opositor.
El presidente de la Comisión de Finanzas, José Guerra, explicó que la inflación desbocada se debe a "la impresión de dinero del Banco Central de Venezuela (BCV) para financiar el déficit del Gobierno".
"El 70 % del déficit del Gobierno venezolano para el año 2017 fue financiado con impresión de dinero", dijo Guerra, que agregó: "La inflación es distinta a la hiperinflación porque la inflación dentro de todo es normal. Una hiperinflación es insoportable. Es la ruina de un país".