Según estableció el Gobierno, la medida busca recuperar la estabilidad técnica y financiera del sector eléctrico, entrará en vigencia a partir de mañana.
La Secretaría de Energía, a través de un comunicado, comunicó que subirá el servicio un 150% en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) justificó la medida argumentando la necesidad de reducir las transferencias del Estado Nacional al sector eléctrico y promover un equilibrio económico sostenible.
Se espera que los aumentos superen el 400% en usuarios no residenciales. Para los hogares, el impacto será considerable, con un incremento del 150% en la factura de usuarios N1 (altos ingresos, sin subsidios), pasando de $13,900 a $34,332. Los usuarios N2 (bajos ingresos) experimentarán un aumento del 70%, pasando de $4,360 a $7,415, mientras que los N3 (ingresos medios) enfrentarán un incremento del 65%, de $4,783 a $7,850.
El Gobierno destacó que estas medidas buscan alinear las tarifas con el costo real del suministro y establecer un sistema que promueva el pago por el uso de la electricidad, similar a cualquier otro bien.
La implementación de estos ajustes se realiza tras las correspondientes audiencias públicas y busca contribuir a la recuperación del sector eléctrico argentino.