Durante la madrugada del viernes y primeras horas del sábado pasado, se produjo un sismo de una magnitud de 6,8, en la región del Alto Atlas, cerca de Marrakech, dejando como saldo más de 2.000 personas fallecidas y cerca de 2.421 heridos.
Si bien desde Cancillería informaron que no hubo víctimas de nacionalidad argentina, sí estaba en zonas aledañas un joven llamado Matías Sabel, y oriundo de Villa Elisa, quien hace uno años comenzó a emprender el viaje de “nómade digital” recorriendo el mundo.
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Dicha decisión de vida lo colocó en uno de los lugares que fue noticia en los últimos días por la catástrofe ocasionada a raíz de un terremoto. Afortunadamente, Matías no fue un número más en la triste lista de víctimas pero sí sintió en carne propia el temor de un acontecimiento que nunca presenció.
“Nos tocó vivirlo desde adentro. Yo no les puedo explicar el cagaso, o sea zarpado. Estábamos (con su amiga) en un departamento en el piso siete. De repente se empiezan a mover las paredes, ventanas, se caen cuadros. Se empieza a mover realmente absolutamente todo. Yo entro en shock, me quedo paralizado, no sabía bien que hacer, viniendo de La Plata. No estoy acostumbrado a terremotos, solamente viví un sismo en México”, comenzó contando en su cuenta de Instagram @matiasnomad.
Y siguió: “Se corta la luz, queremos empezar a salir y empezamos bajar las escaleras. Todo esto con la luz de flash, nenes gritando. Mucho pánico y mucha tensión. Lo que nos daba más miedo, y se notaba, era la incertidumbre como si no estuviesen preparados para esto. Nadie nos venía a decir nada”.
