Es poco común que en el fútbol un jugador se retire tan tempranamente. Muchas veces, estas decisiones están ligadas más a cuestiones físicas que futbolísticas, y en este caso, no fue la excepción. El anuncio fue realizado anoche por el propio protagonista, y si bien hacía tiempo que no estaba en actividad, la medida que tomó no dejó de llamar la atención de muchos hinchas, que lo despidieron con emoción. Este cambio en su vida coincide además con un gran momento personal que está viviendo, pues hace pocos días blanqueó que estaba esperando un hijo junto a su pareja. ¿De quién se trata?
"Gracias fútbol. Bueno, me costó muchísimo aceptar esta decisión, ME RETIRO del Fútbol profesional con 30 años. Fueron 13 años de profesión; cumplí todos mis sueños y viví cosas que jamás las soñé", afirmó Diego Mendoza, en su cuenta de Instagram, para revelar de ese modo que colgaba los botines. "El único deseo que tuve siempre, y -desde chiquito- fue jugar en un estadio con 50 mil personas. Y así fue que llegué a jugar una Copa Libertadores. Y recuerdo, que siendo muy chico, cuando hacía goles, le decía a mi viejo 'ya se los voy a hacer al Pato Abondancieri'…. y hasta convertí goles en una Copa del Rey", agregó después, cuando realizó una recopilación de su carrera.
"También le prometí a mi vieja que iba a vivir del fútbol (mientras miraba el estadio de Estudiantes en 1 y 57) y quién iba a decir que tiempo después, yo debutaba con esa camiseta. Viví los mejores momentos de mi vida y también los peores e imborrables de mi cabeza; y ese es precisamente el motivo de mi retiro… Lo intenté todo. Me banqué lo intolerable, pero los DOLORES y malestares del pie, hoy, me llevaron a tomar esta decisión", añadió finalmente, para explicar las verdaderas razones de su decisión. Vale recordar que la vida de Mendoza cambió para siempre, con aquel increíble accidente que sufrió jugando en Huracán.
Ocurrió un 10 de febrero de 2016, cuando el "Globo" se disponía a regresar a Argentina, tras haber logrado la clasificación a fase de grupos de Copa Libertadores, en Caracas. Allí, el micro que transportaba al conjunto de Parque Patricios se quedó sin frenos y volcó en una rampa de emergencia de la autopista Caracas-La Guaira, provocando graves lesiones en algunos futbolistas. Patricio Toranzo, el preparador físico Pablo Santella y Mendoza fueron justamente los más afectados. "Mi hermano fue quién más me acompañó en todo este proceso. 7 difíciles años desde el accidente en Venezuela… y es a quien más le agradezco el apoyo incondicional. También a mi vieja y a mi viejo", subrayó.
Ver esta publicación en Instagram
Ese accidente provocó que a Mendoza le tengan que realizar una limpieza profunda en su tobillo y Toranzo, quien sufrió la amputación parcial de cuatro dedos del pie izquierdo, fue su gran compañero en esa recuperación. Aunque logró volver a pisar una cancha en septiembre de ese mismo año, todo se le hizo cuesta arriba ya, y en los últimos años de su carrera pasó por Belgrano e Ibiza de España, antes de retornar a Huracán. "Gracias fútbol porque me diste amigos, me hiciste conocer personas increíbles, me ayudaste a viajar por el país y hasta jugué en Europa. Lo que viví como jugador fue una locura; de corazón que jamás lo imaginé. Gracias a todos los que fueron parte de mi carrera", cerró.
El nacido en General Madariaga, formado en la cantera de Estudiantes, debutó en el "Pincha" en el año 2013 y le costó asentarse en su primera etapa en el club, por ello, fue cedido a Villa San Carlos, durante su inédito paso por la entonces B Nacional. Luego fue cedido a Nueva Chicago, en la misma categoría, y en su retorno al "León" encontraría la ansiada continuidad. Hoy, ya retirado, tiene entonces una única motivación: su familia. Con su pareja de hace algunos años, la periodista Josefina Ansa, están esperando un hijo. "A vos @chinitaansa por bancarme desde el día 1 que te conocí con mis mil problemas, estudios médicos, tristezas y hasta depresiones interminables", le dedicó.
