El aislamiento social preventivo y obligatorio (ASPO) tuvo lugar en el país al comienzo de la pandemia, desde el 20 de marzo, en esa etapa se establecieron fuertes restricciones a la circulación y a las actividades de todos los ciudadanos, solo los comercios y trabajadores esenciales fueron habilitados a trabajar. A medida que se fue renovando la medida, se fueron sumando excepciones en diversos sectores económicos.
En las últimas semanas, se habilitaron también salidas recreativas con los menores de 16 años y la práctica de ejercicio en horarios restringidos. Tras los permisos, se dispararon los casos de coronavirus en el AMBA por lo que se estima que retomarían a la fase 1 de la cuarentena.
Esta etapa de aislamiento estricto' tenía el objetivo principal de 'planchar la curva' de contagios y fue la medida que más impactó en la vida cotidiana de todos los argentinos, con limitaciones que se extendieron, por primera vez, hasta el 31 de marzo.
De acuerdo al cuadro que elaboró el Ministerio de Salud, la Fase 1 implicaba una circulación únicamente circunscrita a actividades esenciales y una movilidad de la población de hasta el 10%, siempre y cuando el tiempo de duplicación de casos se dé cada cinco días o menos.
En la fase 1 de la cuarentena solo están habilitados los negocios de tareas esenciales : venta de alimentos, farmacias, ferreterías, artículos de limpieza y veterinarias.
La restricción de la circulación es completa y los ciudadanos sólo deben adquirir los productos indispensables en comercios barriales, que no impliquen mayores desplazamientos de sus domicilios.
La resolución presidencial establecía la prohibición de desplazarse por rutas, vías y espacios públicos, a fin de prevenir la circulación y el contagio del virus.
Además, las fronteras quedan cerradas y se suspende el transporte aeronáutico entre jurisdicciones y los viajes internacionales, a excepción de los vuelos de repatriación.
Estuvo suspendida la actividad de bancos, escuelas, transporte público de pasajeros, cobranza de impuestos y servicios, la actividad registral nacional y provincial, la producción para exportaciones y procesos industriales específicos.
Aunque posteriormente fueron habilitadas, en el inicio de la cuarentena las restricciones abarcaban a los peritos y liquidadores de siniestros de compañías aseguradoras, la venta minorista (solo con pago electrónico y envío a domicilio), la atención médica odontológica y en ópticas, los laboratorios de análisis clínicos, los centros de diagnóstico por imagen, los establecimientos para víctimas de violencia de género.
Queda prohibida la actividad en eventos sociales, eventos masivos, deportivos y religiosos, centros comerciales, cines, bibliotecas, locales gastronómicos, gimnasios, teatros, museos, parques y plazas y cualquier otro espacio público o privado.
De acuerdo al decreto presidencial del 20 de marzo, "todas las personas deberán permanecer en sus residencias habituales o en el lugar en que se encuentren y abstenerse de concurrir a sus lugares de trabajo".
También estuvieron restringidas las salidas recreativas y la actividad física .
Una de las primeras decisiones que aún se mantiene es la suspensión de las clases en todos sus niveles, por lo que los estudiantes realizan, desde entonces, sus tareas escolares bajo la modalidad virtual.