Un equipo de científicos del CONICET recibió un subsidio de 100.000 dólares otorgado por la Unidad Coronavirus (agencia que depende del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación) para investigar y desarrollar la tan esperada vacuna contra el COVID-19.
Se trata de un proyecto liderado por Juliana Cassataro, investigadora del Conicet en el Instituto de Investigaciones Biotecnológicas de la Universidad de San Martín y especialista en inmunología, enfermedades infecciosas y desarrollo de vacunas.
Será el primer equipo de expertos latinoamericanos que afrontarán este desafío y según expresó Cassataro, "hay algunos grupos en el mundo que están muy adelantados y la pregunta que nos planteamos es si valía la pena empezar algo desde acá. Nuestro proyecto es para probar en más o menos 9 a 12 meses lo que sería la etapa preclínica, y si tenemos buenos resultados, ahí tendremos que conseguir mucho más financiamiento para comenzar la etapa clínica. Probaremos la vía oral y parentenal (se aplica por vía intramuscular o a través de la piel) y la que funcione mejor y, además, sea más económica en cuanto a su producción y facilidad de administración es la que vamos a seguir".