Durante su discurso del Estado de la Unión el actual mandatario estadounidense emitió una orden ejecutiva que contradice la promesa del ex presidente Barack Obama, hecha en el 2009, de cerrar por completo las operaciones de la bahía de Guantánamo en Cuba.
La orden se dio a conocer por la Casa Blanca momentos antes del discurso del presidente el martes por la tarde, y Trump se refirió a la misma con estas palabras:
"Estoy cumpliendo otra promesa, acabo de firmar, antes de salir, una orden que exige al secretario Mattis, que está haciendo un gran trabajo, que vuelva a examinar nuestra política de detención militar y que mantenga abierta las instalaciones de detención en la bahía de Guantánamo", dijo. "Le pido al Congreso que garantice que, en la lucha en contra de ISIS y Al Qaeda, sigamos teniendo todo el poder necesario para detener a terroristas, donde sea que los persigamos, donde sea que los encontremos".
El presidente Trump estableció durante su campaña que quería mantener las operaciones de la bahía en marcha y "cargarlo con algunos malos tipos".
41 prisioneros se mantienen en Guantánamo 16 años después de su apertura, y de los 700 prisioneros que se han establecido allí solo algunos han sido acusado de un delito o llevados a corte.
